Si estás sana y tu embarazo es normal, es seguro continuar o comenzar a hacer ejercicio físico regular. Cuanto más activa seas y más en forma estés durante el embarazo, más fácil será adaptarse a los cambios en tu cuerpo y al aumento de peso. También te ayudará con el parto.

Mantén tu actividad física diaria (correr, yoga, bailar o pasear) por el tiempo que te sientas cómoda.

Hacer ejercicio no es peligroso para tu bebé, no aumenta el riesgo de aborto, bajo peso del bebé ni parto prematuro. Hay evidencia que demuestra que las mujeres que hacen ejercicio tienen menos posibilidades de tener problemas durante el embarazo y el parto.

Sigue siendo importante hablar sobre hacer ejercicio con tu matrona durante tus primeras visitas antenatales.

Puede no ser apropiado hacer ejercicio físico con ciertas condiciones:

  • Ciertas enfermedades de corazón y pulmones
  • Traqueloplastia o punto de sutura cervical
  • Embarazos de gemelos o trillizos con factores de riesgo de parto prematuro
  • Placenta previa después de la semana 26
  • Parto prematuro o ruptura de membranas
  • Preeclampsia o hipertensión gestacional 
  • Anemia severa

¿Cuáles son los beneficios de hacer ejercicio durante el embarazo?

  • Reduce el dolor de espalda
  • Mejora el estreñimiento
  • Puede reducir el riesgo de diabetes gestacional, preeclampsia y parto por cesárea
  • Aumento saludable de peso durante el embarazo
  • Mejora el estado físico y fortalece el corazón y vasos sanguíneos

Consejos para el ejercicio durante el embarazo

No te agotes. Puede que necesites bajar el ritmo según el embarazo progrese o si tu equipo de maternidad te lo recomienda. Si dudas, pregunta a un especialista.

Como regla general, deberías de poder mantener una conversación mientras haces ejercicio durante el embarazo. Si te falta el aliento mientras haces deporte, seguramente el ejercicio sea demasiado extenuante.

Si no hacías mucho deporte antes de estar embarazada, no comiences con ejercicio extenuante. Empieza poco a poco y aumenta el ejercicio siempre y cuando estes cómoda. Si comienzas algún tipo de clases (ciclismo, clases de aerobic o nadar), coméntale al instructor que estas embarazada.

Recuerda que el ejercicio no debe ser extenuante para ser beneficioso.

Consejos:

  • Calienta antes de hacer ejercicio y estira después.
  • Intenta mantenerte activa todos los días – puede ser suficiente con caminar 30 minutos al día, pero si esto no es posible, un poco es mejor que nada.
  • Evita ejercicios extenuantes en días de calor.
  • Bebe mucha agua y otros líquidos.
  • Si vas a clases, asegúrate de que tu profesor está cualificado y sabe que estas embarazada y de cuantas semanas estas.
  • Puede que quieras probar a nadar. El agua te dará soporte a tu cuerpo. Algunas piscinas ofrecerán clases de aqua-natal.
  • Ten cuidado cuando los ejercicios que supongan un riesgo de caída (montar a caballo, ciclismo o esquiar). Las caídas durante el embarazo pueden causar lesiones al bebe.

Ejercicios que se deben evitar durante el embarazo

  • No estés mucho tiempo tumbada mirando hacia arriba. Particularmente después de las 16 semanas de embarazo, el peso de tu útero puede hacer presión sobre los vasos sanguíneos que devuelven la sangre al corazón y esto puede hacerte sentir mareada.
  • No participes en deportes de contacto donde hay riesgo de que te golpeen, como por ejemplo judo o boxeo.
  • No hagas submarinismo, porque el bebé no tiene protección contra la descompresión y embolias gaseosas (burbujas de gas en la sangre).
  • No hagas deporte a más de 2.500m de altitud sobre el nivel del mar – esto es porque tú y tu bebé corréis el riesgo de mal de altura.